Comprando dulces

Llego a la tienda, abatido por la frialdad de Artemisa, "chocolate" necesitaba chocolate con urgencia, podria resultar infantil, no le interesaba, recordaba como se las ingeniaba para robar chocolates del despacho del director del orfanato, era algo que realmente lo complacia, pidio en la tienda una bolsa con ranas de chocolate, pago, y abrio una de ella, se la metio en la boca, entera, saboreandola, era realmente un antidepresivo? no lo sabia, pero si un compañero fiel. Sonrio para si mientras terminaba de tragar.

- No muy lejos - dijo distraido, sacando otra rana de chocolate.

Lo alcanzó en HoneyDukes, solo lo miro.

La miro cuando entraba por la puerta, comio de su rana.

Se acercó a él, firme.

- POdemos hablar?

Asintio con la cabeza, mirandola.

- Aqui, o en otro lado?- pregunto mirandole los labios.

Se encogio de hombros y trago la rana.

- Chad, no pido mas que, que me escuches, podrias intentar colaborar, aunqeu sea?- pidio con ojos tristes.

- Te escuchare - dijo guardando la bolsa de dulce en el bolsillo de su tunica.

SE masajeo el punt de la nariz, algo cansada.

- Esta bien Chad.

- Vamos a otro lado - murmuro mirando de reojo al vependiente del local, que no paraba de mirar curioso.

- Esta bien, a donde quieres ir?- pregunto torturando con la mirada al curioso.

Dejo escapar una leve risa - A donde quieras...

Apartó su mirada del curioso al oir a Chad.

- La casa de los gritos o cualquier lugar sin mirones- fulmino otra vez al dependiente.

- Esta bien - dijo caminando hacia la salida.

Salio caminando con el apso resuleto