En Madame Pudipie

Llego a el local, se sento a esperar ser atendida, una chica se le acerco preguntandole que deceaba tomar - un te por favor - dijo sonriendo. a los cinco minutos el te aparecio en su mesa - que buen servicio penso tomando de este, tranquila.

Se sobresalto al escuchar un grito dandose vuelta instintivamente - Ginny!!! - dijo sonriendo, mas calmada.

Le siguio el abrazo a su tia, hacia mucho que no la veia, vio sus ojos humedos.

- que te pasa? - pregunto preocupada.

- a mi no me mientas Ginny, estuviste llorando... - dije severamente, pareciendome a ella.

Entró en la sala de té sin prestar atencion, pensando en Lily Luna.

- Hubiera estado bien, haber venido aqui.. juntos... si hay uelta, seria el primer lugar que visitariamos... - se dijo mientras se sentaba en una mesa alejada.

Miraba a las parejas, todas acarameladas, se sintio aun peor.

Miró a joven castaña y a la colorada q le habia gritado, le costó reconocerlas, ya que estaba sumergido en sus pensamientos.

- Ginny; Rose, cuanto tiempo- dijo amargo, sentandose con ellas.

Miraba a los dos con preocupacion, uno se encontraba peor que el otro, lo sabia, lo intuia, tomo de su te un sorbo. - como estas Sirius?

- Mirame el rostro y saca tus conclusiones...- dijo sarcastico, permanecia a la defensiva, ya no aguantaba todo lo que le pasaba.

Sentía que todos descargaban en él y él, debia soportar todo eso solo, era un infierno.

- Y es verdad... y es mi culpa- contestó aspero, con la mandibula apretada, ahogando su tristeza.

- Lo se, pero no puedo encontrarla...- contestó, cerrando los ojos, estaba cada vez mas furioso.- lo mas conveniente será que me encuentre y que me mate- dijo con ojos vacios.

Lo tomo asi como estaba, y puso cara de asco.

- Esto mataria a un diabetico- dijo sin animos- no imoprta si muero, me da igual...- no parecia interesado en preservar su vida- mi vida le pertenece a ella, que ella decida entonces.

- Tu no estas mucho mejor que yo... que te pasa?- dijo mirandola sin mirar.

- Por ahi viene la mano, no?- la miro intenso- no se nada de él, pero puedo colaborarte en buscarlo, si lo deseas...- le dijo al verla tan desconsolada.