Un cigarro, un whisky y soledad.

Entro a la sala de los menesteres, realmente consumido. Se sentó en un sillon muy viejo y arruinado y encendio un cigarro.

Caminaba con la mirada gacha, cunado olio tabaco, lo conocía, y lo necesitaba, entró a menesteres a sabiendas de lo que le esperaba del otro lado de la puerta.

- Pasa... no hay nadie- dijo al oler ese perfume tan familiar.

No le dio lugar a hacer nada, Artemisa se arrojo en sus brazos y comenzó a llorar desconsolada, rota por dentro, la abrazo, intentando recomponerla, mientras acariciaba su cabellos, el dolor de su prima tenia nombre y apellido.

- Veo que Ravenclaw es una casa afrodisiaca para los Black, o no?- le dijo acariciandole el rostro, paternal.

- Sirius...- sollozaba intentando componerse- lo arruine... lo arruine, y para peor, te meti en el medio de todo esto...-

En vez de mejorar su animo decaia alarmante.

- Por favor, cariño... no arruinaste nada, descuida, es solo que omiti eso a mi mujer, no crei necesario contarselo; ya sabes, es pasado... lo superamos ambos- la mantenia en sus brazos como cuando aun eran niños, cunado la protegia de las maldades de Bellatrix y Narcissa.

Ella no decia nada, solamente se limitaba a llorar, herida.

En silencio como estaba, se rozaba los labios, con verdadera tristeza, no sentia deseos de nada en absoluto, simplemente de desarmarse en brazos de su primo, mientras este intentaba confortarla... en vano.

- Todo estará bien, creeme... yo hablare con Lily Luna y le explicare todo, y si es necessario.. tambien hablo con Carter, por favor... ya no llores hestt...- le dio una larga calada a su cigarro, olvidando por completo su whisky.

- No es neccesario que hagas esto Sirius... yo yahe crecido como para protegerme sola...- se limpio el rostro con un pañuelo y lo miro a los ojos.

Automaticamente el cuerpo de Sirius fue recorrido por una descarga electrica, una suerte de escalofrio. La miro molesto y volvio a darle una calada a su cigarrillo.

- Nunca mas vuelvas a hacer eso, me escuchaste?- no queria gritarle, no era el momento, pero esas imagenes le habian dolido realmente.

Lo miro sordida, Sirius habia entrado en su mente y habia visto con detalles sus pensamientos y sentimientos, se estremecio y noto el tomo de alarma en su voz.

- Lo siento Sirius...- Se mordio los nudillos, avergonzada.

Las imagenes de su mente eran muy crudas, dañinas para Sirius, deseaba hacerse daño, pero lo unico que habia logrado habia sido dañar a su primo.

Esas imagenes habian conceguido alarmarlo verdaderamente, ver a su prima asi lo preocupaba.

- Quedaras viuda antes de tiempo si él vuelve ahacerte algo asi- dijo asperamente.

- Sirius, tu mujer pertenece a las filas de Voldemort, y yo no interfiero, podria matarla, y lo sabes.. seria mi deber como miembro de la orden....- contesto aspera, no iba a permitir q nada le pasara, no mas- no te entrometas con él, no te interesa- completo.

La furia en los ojos de Sirius era liuidamente negra.

No se preocupo en disimular su enojo, la miro iracundo y termino su cigarro de una calada.

- Que no me interesa?- pregunto casi al borde de perder los estribos e ir por Carter- eres mi prima lo recuerdas?- dijo sin dejar de mirarla.

- No hagas lo que no quieres que te hagan, ninguno esta conforme con la pareja del otro, pero somos dos malditos perros celosos, o no?

Su auto control estaba yendose por el caño, no solia maldecir ni tomarse tales atrevimientos, pero ahora ya no importaba la etiqueta.

- Asi es- dijo secamente, mientras se acercaba a ella.

No importaba ni importaria nada, siempre seria lo mismo, siempre deberia protegerla, pero no de otros, si no de ella misma.

Permanecio sentada en un sofá, alejado del de su primo, mientras se terminaba de secar el rostro.

- Recuerdas esa vez que colgue a Regulus de sus calzoncillos por contarle a mi horrible madre lo de la motocicleta muggle de Alphard?- dijo repentinamente.

Las escenas se aparecieron en su mente, como si las cosas fueran iguales. Sonrio, era grato recordar esas cosas.

- y cunado Bellatrix y NArcissa rompireon mi muñeca?- dijo tambien recordando.

Rompio a reir a carcajadas, recordando a sus primas luego, cuando el habia dejado accidentalmente un par de sapos con pustulas en sus camas, por lo de Artermisa.

La miro un momento mas y encendiendo otro cigarrillo dejo a su prima en esa sala.

Observó como su primo se marchaba y su pena regresaba, se acurruco en el sofá y cerro los ojos, esperando que todo fuera una pesadilla.

caminaba por los corredores buscando un lugar tranquilo, vio una puerta y entro, vio a la chica que estaba alli, sin saber que decir, se quedo parado en la puerta.

Escucho unos pasos en el humbral de la puerta y se desovillo, para quien habia llegado, no esperaba verlo allí. un escalofrio la recorrio y sus ojos se oscuercieron.

- Chad...- dijo en un susurro.

la miro entre avergonzado y dolido, y se acerco a ella despacio - lo siento - dijo al fin - fui muy brusco anoche - dijo mirando al suelo.

- NO se disculpe, esta bien Chad, lo... lo lamento mucho- dijo sin mirarlo aun, sin dejar de temblar.